BUSCAMOS SER LAS ÚLTIMAS NIÑAS VÍCTIMAS DE VIOLENCIA SEXUAL EN ESTE GIMNASIO.
Buscamos justicia, luchando para que los hechos de violencia sexual que vivimos no se repitan. Pedimos el cierre del gimnasio y que el violador no vuelva a estar a cargo del cuidado de niñas y niños nunca más. Alzamos nuestras voces, porque una forma de reparar nuestras vidas es prevenir que a otras les pase lo que a nosotras.
En Ecuador ninguno de los espacios extra curriculares a donde asisten a diario niñas y niños está regulado por una institución que se encargue de velar por su integridad y su seguridad.
Buscamos que estos espacios empiecen a ser regulados y que se genere toda la normativa necesaria y pertinente para la prevención de la violencia sexual contra niñas, niños y adolescentes en espacio extra curriculares.
Buscamos que la sociedad reflexione sobre la violencia sexual contra las niñas, que entiendan que no es fácil romper el silencio, que nos crean cuando decidimos contar nuestros testimonios, aunque hayan pasado 1, 5 o 10 años pues no es fácil hacerlo. Interpelamos a las familias para que escuchen a las niñas y niños que tienen cerca, para que entiendan que no mienten al contar situaciones de violencia sexual.